La nueva Repsol (REP) sin YPF

 

Repsol rebota con fuerza desde soportes clave acompañada por amplias divergencias alcistas en osciladores de precios y volumen. El movimiento es un buen pilar para la construcción de un suelo de ciclo en una empresa que está sabiendo pensar en el futuro en una situación actual dura y que recibe una valoración positiva.

Puntuación total de Repsol (esc. dcha. rojo) y Evolución de la acción durante 2020 (esc. izqda. azul) En lateral diferentes lecturas de indicadores técnicos

Repsol  mantiene en marcha de forma el Plan de Resiliencia, para soportar la crisis actual, mientras que continúa avanzando en su transformación energética a lo “verde” con mayores proyectos en gas, energía solar y eólica. La empresa hace un buen desempeño en el presente mirando al futuro y recibe una recomendación positiva por análisis fundamental (ver “Repsol: apuesta clara por el negocio verde”).

La acción de la empresa ha rebotado con intensidad después de apoyarse en soportes clave de mercado: mínimos de ENE16 y MAR09. El movimiento ha venido acompañado por un fuerte repunte en el volumen de contratación y ha activado amplias señales de compra en los osciladores que acumulan divergencias alcistas. La puntuación total de los indicadores técnicos ha escalado con rapidez hasta los 4,0 puntos que es compatible con una fase de rebote.

Repsol en gráfico diario con Rango de amplitud en porcentaje, oscilador MACD y volumen de contratación. 

 

Un rebote que calificamos de fiable (hemos asistido al mayor repunte en volumen de los últimos 5 años) y que puede ser un buen pilar para la formación de un suelo de ciclo que permita trabajar con un escenario de alzas sostenidas. Miramos a la acción desde un punto de vista constructivo y pensamos que una aproximación a la zona comprendida entre el primer soporte, 6,424, y la directriz alcista que parte de mínimos anuales supone una oportunidad para probar posiciones largas o compradoras.

Fuente.- Estrategias de Inversión