Una vez más Argentina entra en el temido default, ya que este viernes se venció el plazo en el cual este país debió haber cancelado 503 millones de dólares por concepto de intereses a un grupo de acreedores quienes poseen bonos de legislación extranjera.
La situación de Argentina indudablemente va de mal en peor, no solo por la fuerte contracción que ha tenido su economía en los últimos dos años sino también por el hecho que la aparición del Covid-19 cambió definitivamente el nuevo orden financiero mundial.