A ver, crisis va a haber tarde o temprano. Pero no es por capricho del destino. De un modo u otro, todos los que estamos aquí sabemos que está en la esencia del sistema actual basado en deudas y deudas, apalancamientos demenciales, expansiones crediticias y bancos inventando también dinero de la nada, que dejan un 10% por ciento del dinero de los depósitos de la gente en la caja y prestan (sin que la mayoría de los depositantes sean activamente conscientes de ello) a otros el 90% (y esto se consideraba ilegal y criminal hasta hace pocos siglos, mataban a los banqueros si lo hacían y ahora es la norma por la conexión maestra gobiernos/bancos), que, a su vez, cuando se lo van devolviendo, también van prestándolo a otros y tal y pascual (y el dinero se multiplica solo, aunque me pierdo en números y fórmulas matemáticas).
El caso es que es un sistema bueno para crecer, pero imposible de controlar. Así que esto es crecimiento, crisis, crecimiento, recesión, crecimiento, crisis, etc.
Y el jaleo de aquí y de allá, y chanchullos y corruptelas, y otras tantas cosas que se suman, las burbujacas cuando hay un avance tecnológico importante (canales, crisis, ferrocarril, crisis, internet, crisis, etc.), porque no sabemos ir avanzando tranquilos y controlados sino solo a tirones.
En fin, recesión o crisis va a haber, esto es un hecho (todo puede cambiar en esta vida, y esto no es menos, pero de momento el sistema es así, hasta que sea modificado algún día). Puede tardar más o menos tiempo, pero tenemos que recordarlo siempre. No con miedo, solo con perspectiva.