¿Por qué le haces caso a Alnasir?
¿No ves que no es más que un "troll"?
No pierdas el tiempo con él, y sigue, sigamos aportando lo que podamos todos los que hemos sido vilmente estafados, porque hemos confiado en unas entidades en las que ya confiaron nuestros padres y nuestros abuelos.
Y confiaron, y hemos confiado en ellas, porque nacieron precisamente para salvar al pueblo de las garras de los malvados especuladores en cuyas manos han acabado por ponerlas unos gobiernos que no merecen la confianza que el pueblo ha depositado en ellos.
¿Ya nadie se acuerda que el nombre completo de CAJAMADRID es el de Caja de Ahorros y Monte de Piedad de Madrid?
A continuación expongo un extracto de la publicación: “Historia de la Caja de Ahorros y Monte de Piedad de Madrid [1702 – 2002]”. Autores: Manuel Tito Martínez y José López Yepes. Publicado por la Fundación Caja Madrid. Con motivo del tercer centenario. Se halla disponible en INTERNET, en la dirección:
http://www.fundacioncajamadrid.es/Ficheros/CMA/ficheros/F-edic-historiacaja-1.PDF
El Monte de Piedad fué fundado en el año 1702 por el padre Francisco Piquer, capellán del Monasterio de las Descalzas Reales de Madrid (página 11)
Desde una fecha tan temprana como 1431, ofrece España montes de piedad perfectamente configurados inspirados directamente en la doctrina franciscana que tienen por objeto erradicar la usura facilitando préstamos (página 13)
El 25 de octubre de 1838 apareció el decreto de creación de la Caja de Ahorros de Madrid:
“Persuadida por cuanto me habéis expuesto, de lo conveniente que sería establecer en Madrid una Caja de Ahorros en la que puedan las clases menos acomodadas depositar sucesivamente cortas cantidades, percibiendo réditos, con facultad de retirarlas siempre que los convenga; deseosa de mejorar la suerte y las costumbres de estas clases tan dignas de mi maternal solicitud, estimulando su laboriosidad, economía y previsión, he venido en decretar, como Reina Gobernadora, en nombre de mi augusta hija la reina doña Isabel II:
“Artículo único: Se establecerá en Madrid una Caja de Ahorros y de previsión…” (página 98).
¿Como ha sido posible que una institución creada con tan loables fines (y todas las demás cajas de ahorro españolas creadas a imagen y semejanza de la madrileña, página 100) ha venido a caer en manos tan ruines? Algún dia, algunos hoy encumbrados personajes de la política nacional tendrán que dar estricta cuenta de esta felonía.
Y no digo más, porque al que habla todo el mundo le entiende.