Tomando como referencia las cifras de gasto de la plata del Estado por parte del Gobierno, no sería difícil llegar a la conclusión de que Guillermo Moreno, Secretario de Comercio Interior, es un funcionario austero, las cifras lo avalan: hasta el pasado 23 de diciembre había gastado $ 998 millones, tan solo el 39% de los presupuestado, ya que para 2012 contaba con un cupo de $ 2.549 millones.
En el año 2011 ya ocurrió algo parecido, el presupuesto fue de $ 2.150 millones y tan solo utilizó el 45%.
Algunas explicaciones hacen referencia al hecho de que determinados gastos estaban presupuestados y finalmente no se ejecutaron o gastos marcados en unas casillas presupuestarios que finalmente cambiaron su destino. Además de las planillas de Hacienda surge la posibilidad de que se estén utilizando muy pocos recursos para el consumo interno y muchos destinados al sector privado.
Aunque otras fuentes apuntan al excesivo gasto de Moreno en asesores y personal temporal, con los que llenar actos como la bienvenida a la Fragata Libertad la pasada semana e incluirlos como trabajadores en el Indec. Este tipo de empleo no goza de las prestaciones de un contrato laboral habitual y excluye determinadas prestaciones sociales. Muchos lo comparan con el empleo en negro.
Menor gasto en los diferentes Ministerios
Desde luego, gastar más o menos no es sinónimo de una mayor eficiencia ni de cumplimiento de los objetivos. No obstante, debido a la austera política de
Moreno y Kicillof, el
Ministerio de Economía, del cual son dependientes los dos, consiguió un ahorro durante el año de alrededor del
54%.
Ésta no fue el único ministerio donde se anotó un ahorro significativo, en de
Industria fue por ejemplo del
74% y a día 23 de diciembre todos los gastos arrojaban una ejecución presupuestaria del 86%. No obstante, estas no son cifras definitivas puesto que cualquier decreto o
medida retroactiva a 2012 haría variar la cifra anterior.
Las planillas de Hacienda permiten afirmar que las partidas de gasto más importante hasta el día 23 de diciembre fueron las de
Fútbol para Todos con $ 1.048 millones y Prensa y Difusión con $ 835 millones. Por contra existen gastos como Política Ambiental, donde se utilizó un 37% de los presupuestado, y en Desarrollo Sustentable de la Cuenca Matanza-Riachuelo.
Asimismo,
Juan Manuel Abal Medina, jefe del Gabinete de Ministros, recibió numerosas críticas por destinar parte del presupuesto del Estado a financiar los aguinaldo de determinados municipios. El Gobierno no publicó las listas de los municipios beneficiados y por ello se le acusaba de
enmascarar intenciones políticas mediante estas acciones, para captar intendentes en su camino a las elecciones de octubre.
En el
Ministerio de Planificación ocurrió algo muy similar, se destinó una gran cantidad de plata a
sostener Aerolíneas Argentinas o a tapar los agujeros que provocó el sistema energético y no tanto en construcción de escuelas u otro tipo de infraestructuras sociales.
Por encima del Presupuesto a pesar del "ahorro"
A pesar de todos los datos de "ahorro" en los diferentes ministerios señalados, lo cierto es que el
Gobierno gastó $ 83.158 millones por encima del monto previsto de Presupuesto aunque en este caso tampoco se trataría de cifras definitivas puesto que podrían realizarse nuevos ajustes por gastos todavía no declarados.
Cada vez más los Presupuestos parecen papel mojado, el Gobierno los maneja a su antojo mediante
decretos millonarios y utilización de superpoderes. El problema que les surge ahora es que su principal limitación hasta ahora, los recursos, empiezan a agotarse.
